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- Si separamos los empleos en dos grandes categorías, Asalariados y No asalariados, vemos que solo los primeros han crecido en los últimos doce meses en Canarias. En efecto, el número de asalariados ha tenido en el tercer trimestre un aumento interanual de 64.300 personas (+9,3%, el tercer mayor aumento del conjunto autonómico), al mismo tiempo que el de no asalariados se ha reducido en 4.300 (-3,5%).
- Dentro de los no asalariados, el comportamiento ha sido distinto: el número de empleadores ha bajado en 4.000 personas (-11,6%) y el de autónomos -sin personal a cargo- lo ha hecho en 1.200 (-1,4%) mientras que el de Otros (miembros de cooperativas y personas que ayudan en el negocio familiar sin remuneración) se ha incrementado en 900 personas (+50%).
- Entre los asalariados canarios, el sector privado ha contratado a 51.900 asalariados (+9,7% interanual, el cuarto mejor resultado entre todas las autonomías), mientras que el sector público lo ha hecho con 12.500 personas (+7,7%, el sexto mejor resultado autonómico).
- El 68,6% de los empleos asalariados creados en el archipiélago son de carácter temporal: la contratación de 64.300 empleos asalariados se desagrega en la creación de 20.200 plazas indefinidas (+3,9%) y la incorporación de 44.100 personas con un contrato temporal (+25%, el mayor incremento autonómico). Es una dinámica con más fuerza que la del conjunto nacional, donde ambos grupos de asalariados también se han expandido: +2,5% el de fijos y +13% el de temporales.
- Ahora, un 29,1% de los asalariados canarios es temporal (tasa de temporalidad), una proporción que resulta 3,7 puntos porcentuales más alta que hace un año y también claramente superior a la media nacional, que es de un 26%, de hecho, es la cuarta tasa más alta entre las autonomías. Eso sí, la tasa de temporalidad canaria es ahora 4,1 puntos porcentuales inferior a la de 2008, cuando era del 33,2%.
- Nueve de las once ramas de actividad existentes han incrementado su ocupación en Canarias. Los mayores incrementos se han dado en Información y comunicaciones (+52,5%, tras la contratación neta de 9.500 personas), Manufacturas (+46,9%; 11.900 nuevas contrataciones) y Servicios culturales y otros (+22,6%, con 11.200 contratos). Los retrocesos se han dado en Agua y energía (-5,7%, equivalente a la pérdida de 700 empleos) y Actividades Inmobiliarias (-3%, 300 puestos de trabajo menos).